martes, 15 de enero de 2013

Los morritos de mi Pez

¿Estamos todos de vuelta? A ver, en fila, que voy a pasar lista.


Las Navidades quedan en el recuerdo, y parecen muy lejanas ya. Al menos esa es la sensación que tengo yo. Espero que disfrutaran de esos días en familia, con amigos, con las mascotas, con sus niños queridos. Que lo pasaran fenomenal comiendo, bebiendo, durmiendo, descansando, jugando y leyendo. Iba a seguir esta reflexión diciendo que todo lo bueno se acaba; pero no, no es justo, porque lo bueno continúa. O así debería ser.


¿O es que solo se nos está permitido ser buenos y amables en Navidades? ¿Es que ese periodo festivo es el único del año en el que nos juntamos con quienes más queremos? ¿Buscar y emocionar con nuestros regalos es exclusivo de esas fechas? Como verán, no necesariamente. Por eso, aunque suene rematadamente cursi, deberíamos prolongar los buenos sentimientos de esos días a todo el año; sí, a ese 2013 que acabamos de estrenar.


El mio ha comenzado con algunos cambios maravillosos. ¿Se han fijado que El Pez Volador ya tiene forma, colores, cara? Hasta morritos, ¡ahí es nada!


Los Reyes Magos, uno concretamente, Conchi Durán, me lo ha diseñado, y me lo ha regalado, y es precioso, ¿no creen? Si es que mi hermana es una diseñadora gráfica de categoría, y solo hace falta que ella misma sea consciente de su don, porque el talento lo tiene; la capacidad de trabajo, la tiene; la imaginación, la tiene; y la creatividad, también. Grande por fuera, y enorme por dentro. Así es ella, y el mundo la está esperando.


Gracias por tu regalo, hermana. Presumiré de él allá por donde vaya, y allí hasta donde llegue El Pez Volador de Paz. Y por supuesto, más presumiré de ti, porque te mereces todos los éxitos del mundo.

Y hablando de regalos, ¿han recibido lecturas interesantes, divertidas, soñadas, esperadas? ¿Han sorprendido a sus niños queridos con algún libro? Si es así, ¿qué cara han puesto?; ¿les han explicado que ese juego no va con botones, y que su mecanismo es muy sencillo, y que consiste en pasar las páginas con los dedos? Bromas aparte, espero que tanto ustedes como ellos hayan tenido letras entre sus presentes.


Yo he debido de portarme bien, porque me han regalado tres libros. Y el que les quiero presentar y recomendar me ha hecho ilusión, porque es infantil, y ya saben cómo me gustan.


Se trata de El Museo de Carlota, de James Mayhew, publicado por Ediciones Serres.



Se trata de la historia de una niña algo traviesa que convierte su primera visita a un museo en toda una aventura. Hasta tal punto que es capaz de meterse en los cuadros y jugar con los protagonistas de los mismos.


Lo más interesante, para los niños, es saber que la diversión puede ir de la mano de la cultura. Y para los mayores, descubrir que los cuadros que son nombrados en el relato son reales, y que se pueden encontrar en la National Gallery y en la Tate Gallery, ambas en Londres.


Les facilito también un video elaborado con las páginas de este relato, y que puede que les suponga una alternativa a su compra. Aunque ya saben cual es mi opinión al respecto: nada como el olor y el tacto de un libro ilustrado. Pero para gustos, los colores, y los acepto. Así que esta puede ser otra forma de disfrutar de Carlota y su experiencia:


Bueno, me voy a seguir disfrutando de la pintura con Carlota. ¿Nos acompañan?


Ah, y no quiero despedirme hoy sin darles de nuevo la bienvenida a este espacio. Gracias por estar ahí, y espero que entre todos sigan haciendo muy feliz a mi Pez Volador...