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jueves, 8 de noviembre de 2012

El entretiempo

Las lluvias, los cambios de temperatura, las indecisiones a la hora de vestirnos; todo parece que se alía para que, casi por arte de magia, nos despertemos una mañana con la nariz colorada, los ojos llorosos, y una voz de ultratumba. Ha llegado el tiempo de los resfriados. Y de ultratumba llega una de las protagonistas de mi entrada de hoy:

Se trata de una vieja momia a la que le ha pillado por sorpresa un incómodo catarro. ¿Y cómo se cura una momia?, ¿lo han pensado alguna vez? Es complicado, sí, pero un buen doctor dará con la solución.


La momia tiene catarro, de la entrañable Gloria Fuertes, es de 1981, y contaba con ilustraciones de Sánchez Muñoz. Pertenecía a la colección Infantil y Juvenil de la Editorial Escuela Española, extinguida desde 1998. Sí, lo han adivinado, mi Pez Volador tiene un nuevo encargo, llevar a mi querida Momia al Cielo de los libros sin presente. Se me está llenando, y no me hace mucha gracia, pero sabía que esto podía ocurrir. Al fin y al cabo, uno de los objetivos de esta ventana literaria era y es rendir homenaje a mis recuerdos impresos, a las lecturas que me acompañaron durante mi infancia. Por ese lado, estoy muy satisfecha con la aventura que emprendí hace unos meses.

Bueno, continúo.

He encontrado una página web dedicado a Gloria Fuertes, y buceando un poco en ella, he dado con el relato griposo:


Anímense, cuéntenle esta historia a sus niños queridos, sobre todo a aquellos que estos días están malitos. Ellos estarán especialmente aburridos, pero estoy segura que gracias a un cuento, relatado por ustedes, conseguirá hacerles sonreir.

Para acompañar estas letras, pueden jugar a aprenderse una canción. ¿Se apuntan? A los de mi quinta seguro que les suena ésta, porque era muy popular. Es muy sencilla, y es fácil de memorizar.

A ver, afinen bien las orejillas, que aquí va:


La conocen, ¿verdad? Pues ha llegado el momento de pasar el testigo a las nuevas generaciones. Ánimo en la tarea...

Y como premio, cuando nos curemos, ¿qué tal un paseo por el campo?. Bien abrigados, eso sí, podemos llevar a los pequeños a conocer parajes cercanos, donde seguro que descubren plantas, paisajes o animales que aparecen en los libros, que salen en la tele, y que resulta que son de verdad. Por ejemplo, ¿un corderito?


Este es el protagonista de El jardín de Babï, un precioso libro de Mandana Sadat, publicado en 2004 por la Editorial Kókinos. Es una mezcla de exotismo, delicadeza, ternura y cultura exportada desde el lejano Irán. ¿Acompañan a este pequeño en su aventura de crear un jardín en medio del desierto?


Como verán, hoy les he propuesto un planazo: cuento, canción y paseo. Con un poquito de voluntad y paciencia podemos convertir cualquier momento en mágico. Incluso uno en el que alguno de nuestros niños queridos se encuentre enfermo, con catarro, por ejemplo.

A los griposos, les deseo una pronta recuperación (entre los que me tengo que incluir); y a los demás, coman naranjas, tomen miel y cuídense mucho.

Un besazo